EL GRAN DIOS

Domingo, 13 de diciembre de 2015
Por: Oraciones Puritanas

¡Oh fuente de todo bien!

Destruye en mí todo pensamiento altivo, quiebra el orgullo en pedazos y dispérsalo en el viento…

Aniquila cada trapo inmundo de justicia propia, implanta en mí, verdadera pobreza de espíritu, humíllame para que yo pueda odiar y aborrecerme a mí mismo, abre en mí una fuente de lágrimas penitentes, quiébrame y entonces sanare, así mi corazón será habitación propicia para mi Dios, entonces que el Padre haga morada en mí, entonces que el bendito Jesús traiga sanidad en su toque, entonces el Espíritu Santo derrame Gracia santificadora, ¡oh Santísima Trinidad! , tres Personas en un solo Dios, mora en mí – templo consagrado a Tu Gloria. Cuando estás presente, el mal no puede permanecer.

En tu comunión hay plenitud de gozo, bajo tu sonrisa hay paz de conciencia, a tu lado ningún temor perturba, ninguna aprensión quita la tranquilidad de mi mente. Contigo mi corazón florece perfumado. Hazme mirar a través del arrepentimiento, a Tu interior. Nada excede Tu poder, ¡Nada! es demasiado grande para realizase, ¡Nada! es tan bueno para serte dado a ti. Infinito es tu poder, ilimitado Tu amor, sin tamaño es Tu Gracia, glorioso es Tu nombre salvífico.

Que los ángeles canten por los pecadores arrepentidos, pródigos restaurados, apóstatas que fueron reformados, hijos de Satanás libertados, ciegos que ahora ven, corazones quebrados que fueron sanados, desanimados que cobraron ánimo, los llenos de justicia propia desnudos, el formalista huyendo de un rincón de mentiras, el ignorante siendo esclarecido, y los santos creciendo en santa fe.

¡Grandes cosas para un gran Dios!

Leave a Comment

Your email address will not be published. Required fields are marked *